Son pocas las ocasiones en las que dispongo de un poco de tiempo extra y total libertad en los espacios que fotografío para llevar a cabo experimentos y proyectos personales fotográficos.
Cuando realizo un reportaje fotográfico de interiores, por razones lógicas, suele ser de día y con la vivienda vacía. Es necesaria una buena iluminación para mostrar sus espacios, sus materiales, sus peculiaridades. Pero hace ya tiempo que tenía ganas de retratar su otra cara: la casa habitada.
La casa habitada me permite experimentar con nuevas fuentes de iluminación interiores, trabajar con modelos, alto contraste y en clave baja. Me permite mostrar cómo los interiores se transforman durante la noche.
En este caso, la casa habitada es una vivienda destinada al alquiler para estudiantes y nos habla algunos de los usos privados de la habitación, pequeño microcosmos individual, en contraposición con el salón, su zona común.
Espero que os guste.
¿Quieres ver cómo es esta vivienda de día? Puedes ver mi reportaje en la web de GAP interiorismo
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